La semana anterior te hablé acerca de cómo puedes transformar tus reacciones automáticas basadas en creencias limitantes, en actos conscientes originados en tu voluntad de vivir con menos culpa y vergüenza y más armonía.
Te he hablado mucho acerca de las creencias limitantes y que ellas forman parte de tus programaciones mentales, esas creencias revolotean en tu cabeza y te condicionan a circunstancias de vida que no quieres vivir, por eso vale mucho la pena transformarlas. Muchas veces cambiarlas por pensamientos positivos lejos de ayudarte te deja dudando sobre si eso es posible para ti o para alguien, te deja con la sensación de incertidumbre, de que quizás no seas capaz de vivir mejor o que algo está mal en ti o estás haciendo mal. Para librar ese obstáculo, me gusta realizar un ejercicio que es una especie de puente de las creencias limitantes a los pensamientos positivos, es un paso que te libra de caer en la frustración y se trata de crear pensamientos realistas.
Así que comencemos y seamos realistas, tus creencias limitantes son un mercado de lágrimas, son dramáticas y están llenas de victimismo y de verdad no reflejan la realidad sino una fantasía en la que se basa tu ansiedad, tu estrés y tu depresión. Por eso te pido que retomes el ejercicio de la semana anterior o si de casualidad tienes tu lista de creencias limitantes ya alrededor de un tema en particular que puede ser tu vida en pareja, tu salud, tu relación con el dinero o tu situación laboral, utilízala. Checa el artículo aquí y haz lo siguiente:
1. Toma una nueva hoja, colócala de manera horizontal y divídela en 3 partes.
2. En la primer columna escribe el título de Creencias limitantes, en la segunda columna anota Pensamientos realistas y la última columna destínala para Pensamientos positivos. Por el momento sólo utilizaremos las dos primeras y la siguiente semana te ayudaré con la última.
3. En la primera columna escribe tu primera creencia limitante y te pido que con total honestidad reflexiones acerca de la realidad de esta ¿De verdad eso piensas? ¿Crees que esa es una realidad para todos? ¿Habrá alguien que lo viva diferente? Si hay una parte de ti por muy mínima que sea que difiera de esa creencia, describe como podría ser esa otra realidad.
4. En la columna de Pensamientos realistas, describe con pocas y concretas palabras cómo es o podría ser esa otra realidad, por ejemplo: Nunca volveré a enamorarme, puedes cambiarla por... Podría enamorarme de una persona con quien me sienta correspondida y me lo demuestre consistentemente. Otro ejemplo podría ser: El dinero se me va como agua, puedes cambiarla por... Cuando me administro bien el dinero me rinde perfecto. El objetivo es que cuando leas esta columna no te parezca descabellado y te parezca fácil creerlo.
5. Escribe tantos pensamientos realistas al respecto de cada una de las creencias limitantes como desees, en esta columna no hay límite.
6. Desde el momento en el que comienzas a redactar los pensamientos realistas tu estado anímico comenzará a ser diferente, tendrás mejores perspectivas que te ayudarán a disminuir tu estrés y pensar creativamente. Te sugiero que la leas con frecuencia para que sigas notando cambios puesto que la inercia del dramatismo de las creencias limitantes puede tomarte por sorpresa y provocarte conflicto y estrés nuevamente.
No dudes en escribirme para contarme tus experiencias al ponerlo en práctica. ¡¡Mucho éxito!!
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